Si hay algo que puede resultar muy frustrante para las personas como tú y como yo, que cuidamos de nuestros árboles frutales con esmero, es perder la cosecha de los frutos a causa del ataque de los pájaros. Aunque es normal que los pájaros se vean atraídos por los frutos, podemos tratar de mantenerlos a ralla proporcionando protección a nuestros frutales. También hay que tener en cuenta que las aves ayudan a mantener sano el huerto, ya que evitan que se propaguen algunas plagas y es bueno que se acerquen al huerto en los momentos en que nuestras plantas aún no están dando fruto.
La mejor solución es colocar mecanismos de protección cuando llegue el momento de fructificación, evitando así que los pájaros se alimenten de los frutos que vayamos obteniendo en nuestro huerto. ¿Qué barreras de protección podemos utilizar?
Jaulas de cultivo
La manera más sencilla de proteger los arbustos frutales altos, como el frambueso o el grosellero, es utilizar una jaula de cultivo. La jaula hace fácil las tareas de mantenimiento y cosecha de los cultivos. Las jaulas no son más que una tela o malla metálica que puede ponerse o quitarse con facilidad. De esta forma, colocaremos la malla justo antes de que nuestros frutos empiecen a madurar y cuando terminemos la recolección se puede quitar. Esto permitirá además, que las aves sigan visitando (y protegiendo) nuestro huerto, a la vez que los frutos les resultan inaccesibles. Otra solución es utilizar jaulas pequeñas, una para cada cultivo. Este método es más eficaz pero requiere tiempo cada vez que tenemos que mover una jaula.
Las jaulas son de tela o malla metálica y puede ponerse o quitarse con facilidad.
Protección de baja altura
Esta protección está orientada a proteger los cultivos más pequeños, com las fresas. Consiste en utilizar una estructura sencilla como un túnel bajo de tela metálica, que apoyamos en el suelo en forma de U invertida. Si necesitamos cubrir un espacio mayor se puede extender una malla que fijaremos al suelo mediante palos clavados en los extremos. Si el árbol es más alto, podemos utilizar una red que proteja los frutos y sujetemos al suelo con piedras.
Protección sin barrera
Se puede utilizar métodos que busquen ahuyentar a las aves, imitando los factores que les asustan por naturaliza. Entre estos métodos podemos recurrir al clásico espantapájaros, la figura de un halcón falso o, como se hace últimamente, colgar CD en las ramas que emitan reflejos. El problema de estos métodos es que las aves acaban acostumbrándose y perdiendo el miedo, por lo que es recomendable cambiar de método cada pocos días.
